Adiós.

¿Porqué te desangras corazón?

si sabes que jamás fue tuya,

ni un solo beso, una caricia,

ni un solo roce de su cuerpo te pertenecía.

¿Porqué estás tan triste vida mía?

si los recuerdos que tienes de ella son solo eso,

si las palabras que escuchaste de su boca,

no fueron más que el eco de lo que pretendías decir.

Alma mía que no me dejas a menos que te lo pida,

dáme la fuerza para soportarlo una vez más,

que no me hunda en este mar tan profundo y negro,

no me dejes llorar, no me dejes gritar.

Labios que la besaron,

ojos que la lloraron,

y tú, corazón que moriste por ella,

¿porqué no la dejan ir si tanto la amaron?

¿Porqué gritar su nombre si no los escucha?

¿porqué desear que vuelva, si ni siquiera los mira?

déjenla que siga su camino, que no es el suyo

no la llamen más, que no va a regresar.

Y si alguna vez, me la encuentro,

con mucho gusto le diré, que no los he visto.